En un giro que podría calificarse de audaz, cínico, o simplemente español, el país ibérico ha decidido presentar “Zorra” como su candidata para el Festival de Eurovisión de este año. Mientras otros países buscan la melodía más pegajosa, la coreografía más impactante o la letra más inspiradora, España parece haber optado por un enfoque más… peculiar.
“Zorra”, interpretada por un dúo de ancianos que parecen haberse perdido en el tiempo, es una canción que podría ser descrita como una oda a la desfachatez y a la despreocupación por el qué dirán. Con letras que oscilan entre lo francamente inapropiado y lo desconcertantemente hilarante, la elección de España ha dejado a más de uno rascándose la cabeza.
El tema, compuesto por dos ancianos que se hacen llamar “Zorra”, parece ser una mofa autoconsciente de la propia situación española en Eurovisión. Con letras que hablan de “ser la zorra”, la canción parece una burla a la falta de éxito que España ha experimentado en el concurso durante los últimos 54 años.
Desde la última victoria de España en Eurovisión en 1969, con la canción “Vivo cantando”, el país ha sido testigo de una racha de derrotas y decepciones que parece no tener fin. Mientras que otros países vecinos como Portugal y Suecia han logrado alzarse con la victoria en múltiples ocasiones, España parece haberse estancado en un bucle de mediocridad eurovisiva.
Pero no todo es pesimismo en el horizonte español. De hecho, algunos defienden la elección de “Zorra” como un acto de rebelión contra las expectativas convencionales del concurso. “¿Por qué seguir las reglas cuando claramente no nos están llevando a ninguna parte?”, preguntó un ferviente defensor de la canción. “Es hora de romper con la tradición y hacer algo diferente, aunque sea solo por el gusto de sacudir las cosas un poco”.
Sin embargo, otros no están tan convencidos. “¿Realmente queremos representar a España con una canción llamada ‘Zorra’?”, preguntó un crítico musical. “¿Es este el mensaje que queremos enviar al resto de Europa? ¿Qué somos una nación de despreocupados y pícaros? No estoy seguro de que sea la mejor imagen para proyectar”.
A pesar de las dudas y las críticas, parece que “Zorra” está aquí para quedarse. Con su mezcla de desparpajo, humor y un toque de sarcasmo, la canción ya ha generado una considerable atención tanto en España como en el extranjero. Ya sea por amor o por morbo, parece que todos tienen algo que decir sobre la elección española para Eurovisión este año.
Y así, mientras el resto del mundo se prepara para el espectáculo anual de música, baile y extravagancia que es Eurovisión, España se prepara para enfrentarse una vez más al escenario más grande de Europa. ¿Será este el año en que finalmente rompan la maldición de la victoria esquiva? ¿O seguirán siendo los eternos perdedores de Eurovisión? Con “Zorra” como su carta de presentación, solo el tiempo lo dirá.