En un desayuno informativo que parecía inspirado por el mismísimo Doctor Who, Antonio Maíllo, coordinador federal de Izquierda Unida, se ha lanzado a elogiar y criticar a Yolanda Díaz con una franqueza digna de alguien que ha perdido el filtro, o que tal vez lo ha dejado en otra dimensión. Maíllo no escatimó en halagos: “Yolanda Díaz es la mejor ministra de Trabajo de la historia”. Todo perfecto, si no fuera porque añadió, con un tono misterioso, que en “otras dimensiones necesita mejorar”. Queda la duda de si se refería a una versión alternativa de Yolanda Díaz en un universo paralelo, o si hablaba de una realidad política en la que la izquierda tiene su rumbo claro, cosa que, a juzgar por la situación actual, parece más ciencia ficción que otra cosa.
Maíllo explicó que el espectro progresista necesita una “profunda reestructuración”, en una declaración que podría resumirse como “Houston, tenemos un problema”. Con el llamado “caso Errejón” desbaratando los planes de armonía interplanetaria de la izquierda, parece que los líderes de este espacio están ya no en fase de reflexión, sino en estado de “shock cósmico”. Maíllo habló sobre la urgencia de un “reinicio adecuado”, una especie de Ctrl+Alt+Supr político para reactivar el sistema y conectar de nuevo con “las personas que se han desconectado de nosotros”. Una expresión elegante para decir que hay que recuperar a aquellos votantes progresistas que, probablemente hartos de tantas dimensiones paralelas, han desconectado la televisión.
Pero claro, esta reestructuración progresista va más allá de lo terrenal, porque según Maíllo, la izquierda necesita un nuevo modelo de “toma de decisiones horizontal”. Puede que esto sea un intento de evitar los “vetos cruzados”, o quizá sólo un intento de que todos hablen a la vez y nadie escuche, porque en este espacio multidimensional, cualquier cosa puede pasar.
Para rematar, Maíllo se refirió a Carlos Mazón, presidente de la Comunidad Valenciana, señalando que “tarde o temprano se tendrá que ir”. Según Maíllo, el Gobierno valenciano ha estado más ocupado en “justificar su actuación deficiente” ante la catástrofe de la DANA que en realmente coordinarse con el Gobierno central. Pero tranquilos: esta catástrofe será el comienzo de una “nueva fase de la legislatura”, porque, después de todo, en política la narrativa es lo que importa. O al menos en esta dimensión.